La piedra natural es idónea para piscinas, estanques y otros elementos paisajísticos acuáticos. Su durabilidad, transitabilidad y capacidad antideslizante la hacen muy adecuada para estos espacios. A ello hay que unirle que se complementa perfectamente con el agua, ya que esta realza sus tonos naturales. Podemos ofrecer todo tipo de piedra y pizarra tanto para playas, bordes y vasos de la piscina.